29 diciembre 2006

La planta carnívora

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Una noche, oscura como cualquier otra, fui a tirar la basura y en medio del proceso escuché una pequeña vos que me decía “señor, señor, aquí, aquí !!”, miré para todos lados pero no vi nada.

Cerré la tapa del tacho y escuché nuevamente la misma vos que me decía “noooo, acaaa, adentro del tacho que acabas de cerrar”, y como la escuché media apagada supuse que venía del tacho que acababa de cerrar.

Abrí nuevamante el contenedor de basura y empezé a revolver cual pichi buscando cáscaras de naranja. En eso, lo encontré, un pedazo de banana a medio comer que me miró y me dijo “hola”, pero algo me resultó extraño, ya que no era la misma vos. En eso miré por encima del plátano y divisé entre un pañal y lo que parecía ser restos de arrolladitos primavera, una plantita.

La miré, la agarré (estaba en una macetita) y le dije “Vos eras la que me estaba llamando ?”, “Si” me respondió, “Era yo. Mi nombre es Richard y soy una planta carnívora”.

Quedé asombrado, una planta carnívora, waaaaaww, siempre había querido tener una, y ese era el momento.

Le dije “Creo que vamos a ser muy buenos amigos !”, la planta me sonrió.

La llevé a casa a escondidas, richard tenía unos 30 cms de alto.

Le llevé pollo recién hecho para que coma, le hice una camita abajo de la mia, le presté una condorito para que lea en la noche y le cree una sesión en windows.


Al otro día, me levanté y no estaba, pensé que todo había sido un sueño excepto por el hecho de que apareció mi perro con richard prendido al cuello.
“Richaaaard !!” dije con entusiasmo. Me miró y sonrió.

Lo agarré, me lo puse en el bolsillo del pantalón y nos fuimos a la facultad.

En el camino me topé con tres malandros, feos feos podría decir, pero no les tuve miedo, tenía a richard. El más negro y alto de los tres me djio “Eh, bo, amistá, dame plata” a lo que le respondí “negativo”. El gusano de piel oscura me miró con odio y le hizo una seña a las otras dos gragolas que iban con el. Estas me agarraron con las garras y no podía moverme. En eso el gusano me mete la mano en el bolsillo en busca de cobre cuando... “Ajaaaaaa” dice, “ encontré algo !”.

En ese mismisimo instante se escuchó un ruido seco... “Jam”. El malandro sacó la mano.... el brazo en realidad, la mano había sido banquete de richard !
Llorando se alejaron, richard me había salvado.


Pasó el tiempo y richard siempre cumplía, como la vez que iba manejando y frené en un semáforo. Otro gusando de la calle vino y me dijo de pesado que le de plata que el me limpiaba el vidrio, le dije “ anda del lado del acompañante que mi amigo te da unas monedas”.
Allá iba el troglodita, super contento y babeandose a la ventana del acompañante, claro !, no sabía que ahí estaba mi fiel richard.

Lo último que vi del limpiavidrios fue su hígado, ya que richard no come hígado, le cae mal.

En fin, al pasar el tiempo richard adquirió la habilidad de volar, y un día me dijo “querido amigo, he de volar, adios y no olvideis que si no te ve, no te ve”.

Y allí se fue, mi guía, mi tutor, mi fiel y leal amigo, richard, la planta carnívora.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Horrible lo de la plantita.